Tanto a la hora de ejercer como laboratorio de aguas y residuos como de realizar acciones relativas a la consultoría ambiental o marina (como pueden ser la inspección, la caracterización de residuos, el muestreo y el análisis del fondo marino, etc.), resulta esencial que el laboratorio especializado encargado de llevar a cabo estos procedimientos cuente con la acreditación requerida que garantice unos resultados competentes de cara a cualquiera de los clientes que contrate sus servicios.
A pesar de que la palabra “laboratorio” está asociada a conceptos totalmente imprescindibles para el desarrollo de dichas actividades (profesionalidad, tecnología, efectividad), lo cierto es que no todos los laboratorios dedicados a la práctica ambiental o de otros tipos cumple con estos requisitos. Por esta razón, es muy importante contar con los servicios de los laboratorios acreditados, ya que como veremos a continuación, las consecuencias de optar por entidades alternativas sin ningún tipo de credencial pueden ser de riesgo.
Acreditación ENAC: garantía de calidad
En el momento que una empresa se plantea la contratación de, por ejemplo, servicios de ensayo, analítica de muestreo o de calibración, debe priorizar contar con un laboratorio que ofrezca unas garantías basadas en su capacidad para aportar la tecnología, el conocimiento y la experiencia necesarias como para obtener unos resultados coherentes a la realidad.
Los laboratorios que cuentan con la acreditación ENAC son, precisamente, los que han demostrado disponer de los medios y del bagaje necesarios como para aportar los resultados esperados a las empresas. En cambio, en el caso de los laboratorios sin acreditación, el cliente sólo dispone de la palabra del laboratorio respecto a sus capacidades y confiar en que sus procedimientos no deriven en cualquier tipo de problemática.
¿Qué ha demostrado un laboratorio acreditado?
Un laboratorio que ha obtenido la acreditación ENAC ha demostrado una serie de requerimientos para el correcto desarrollo de sus actividad:
- Estar en disposición de personal competente.
- Disponer de los equipos e instalaciones necesarias.
- Encontrarse en posesión de equipos calibrados y mantenidos en las condiciones adecuadas.
- Ejecutar métodos y procedimientos en dominio y consonancia con las mejores prácticas técnicas.
- Someter a un estricto control de calidad a cualquiera de sus actividades.
Para realizar estas comprobaciones, ENAC realizada toda una serie de auditorías comprendidas por expertos técnicos en todas las áreas de discusión y de acuerdo con las normativas y criterios establecidos a nivel internacional. De esta manera, cuando una empresa contrata los servicios de un laboratorio acreditado, no solamente adquiere la calidad profesional del laboratorio en cuestión, sino también de las ventajas que la acreditación ENAC supone, como el reconocimiento internacional de los resultados o la minimización de riesgos asociados.